¡Gatillazo… oh no!
Que levante la mano el que no haya tenido alguna vez un “gatillazo” y que levante la mano la que no haya tenido alguna vez una relación sexual en la que su pareja haya tenido uno. No os veo, pero intuyo que todos/as estáis con la mano levantada.
Definición de gatillazo
Para saber exactamente por qué habéis levantado la mano, podemos empezar por definirlo: consiste en la dificultad o imposibilidad para tener una erección o la pérdida de ésta. Se podría decir que es la manera coloquial de llamar a la disfunción eréctil. La diferencia entre ambos términos, es que gatillazo es cuando hay una falta de erección puntual y disfunción eréctil cuando es una situación frecuente.
Problemas de erección: causas y soluciones
Antes de nada hay que descartar que haya un problema físico, así que lo mejor es que acudáis al médico y os haga una revisión. Además os hago una pregunta: ¿cuando os masturbáis tenéis algún problema de erección? Si hace mucho que no lo hacéis, probadlo, pero para ello intentad estar en un ambiente relajado; solos en casa, sin nadie que os interrumpa y sin la presión de tener algo que hacer después. Si la respuesta es que cuando estáis a solas con vosotros mismos hay una erección hasta llegar al orgasmo, ya está descartado que haya un problema físico porque si lo hubiera ocurriría a solas o acompañados.
He buscado en la R. A. E. el significado de gatillazo y una de las definiciones que aparece es la de un “error de puntería ocasionado al ejercer demasiada presión sobre el gatillo de un arma de fuego”. Sí, ya sé que no tiene que ver mucho con las relaciones sexuales pero si la leemos con más detenimiento nos podemos dar cuenta que algo así es lo que ocurre cuando existen problemas de erección, probablemente sin darnos cuenta estamos presionándonos demasiado y por eso no hay erección o ha desaparecido.
Al comienzo hemos visto que todos habíais levantado la mano porque a todos os ha ocurrido alguna vez. Esto quiere decir que es de lo más habitual, no pasa nada si en una relación sexual desaparece la erección o no se consigue. En las mujeres también ocurre, pero al no ser tan visual puede pasar más inadvertido. Durante todo el tiempo que dura la relación sexual (desde los primeros besos y caricias e incluso desde que comenzamos a desearla hasta que termina con o sin orgasmo) hay altibajos en la excitación, no estamos siempre al mismo nivel porque de repente pensemos en otra cosa o porque en ese momento las caricias que nos estén haciendo no nos excitan demasiado… da igual el motivo, lo importante es saber que es normal y sano.
Si te ocurre en alguna ocasión lo mejor es hablarlo con tu pareja para que no lo añadáis a la lista de problemas de pareja y así poder incluso bromear con ello. Lo importante es que no vayamos a la siguiente relación sexual con ansiedad por pensar que va a volver a ocurrir (ansiedad anticipatoria) porque en el sexo tenemos que estar relajados para que todo nuestro cuerpo responda de la manera adecuada y espontánea.
Hay que recordar que lo mejor es la comunicación entre vosotros para evitar las discusiones de pareja, da igual cuál sea el problema, hay que saber hablarlo y como ya hemos comentado en otras ocasiones, el área sexual es la parte más íntima que vais a compartir. De esta forma evitamos que se cree un bloqueo emocional al tener un tema tabú entre nosotros que puede hacer que haya una separación de pareja, tanto física como emocional.
Si a pesar de tener todo eso en cuenta el problema persiste lo mejor es acudir a terapia sexual y que lo hagáis ambos, porque aunque consideréis que esto sólo es un problema que tienen los hombres, las relaciones sexuales son cosa de dos y las soluciones a los problemas sexuales también son cosa de dos. En nuestro centro psicológico contamos con una sexóloga en Granada especialista y con una amplia experiencia en el tratamiento del gatillazo que podrá ofrecerte toda la ayuda que necesitéis. Si lo prefieres porque estás fuera de Granada o porque te parece más cómodo, también disponemos de terapia online.
¡No dudes en ponerte en contacto aquí! Y por favor, deja las vergüenzas a un lado, que esto es lo más normal del mundo.